2be Psychotherapy
← Volver al diccionario

Fisura anal

Conflicto Biológico

Desde la biodescodificación, la fisura anal se vincula con un conflicto relacionado con límites personales, expulsión y control de la expresión. Indica que la persona ha estado conteniendo una emoción poderosa, especialmente enojo o frustración, y siente que hay una invasión a su intimidad o a su espacio. Este desequilibrio emocional se expresa en el cuerpo como una ruptura en la zona anal para convertir la tensión contenida en una vía de salida simbólica. A menudo se asocia a experiencias en las que la persona ha tenido que callar frente a una demanda externa o ha percibido que no puede liberar lo que siente sin repercusiones.

Mensaje Simbólico

El cuerpo transmite un mensaje de necesidad de soltar lo que ya no sirve y de reconfigurar límites para evitar la acumulación de tensiones. Es como una grieta que pide canalizar la emoción de forma segura y respetuosa, permitiendo que el cuerpo recupere su equilibrio al expresar con claridad lo que se siente.

Causa Psicoemocional

  • Aprisionar la ira o la molestia para mantener la paz en relaciones cercanas
  • Sensación de ser invadido, obligado a callar o a cumplir reglas que limitan la autenticidad
  • Conflictos de poder o control, ya sea en el ámbito familiar, laboral o sentimental
  • Patrones transgeneracionales de silencio ante las propias necesidades

Camino de Sanación

  1. Identifica la emoción dominante: escribe una lista de situaciones recientes en las que te has sentido obligado a callar o a no expresar un límite.
  2. Ejercicio simbólico: visualiza una puerta o candado en el área de la pelvis; imagina poner una llave para abrirla y permitir que tu verdad salga de forma sana.
  3. Practica asertividad: elabora una frase corta para expresar una frontera sin agresión, por ejemplo: "Necesito expresar lo que siento para mantener mi bienestar".
  4. Ritual de liberación: redacta una carta a quien te hizo callar, exprésala en voz alta ante un espejo y luego destrúyela simbólicamente.
  5. Cuida el suelo pélvico y la respiración: realiza ejercicios de respiración diafragmática y movimientos suaves que favorezcan la relajación en la zona inferior del abdomen.