Oído medio
Conflicto Biológico
En la biodescodificación, el oído medio se asocia a conflictos relacionados con la recepción de información y la escucha en el entorno. Este conflicto surge cuando la persona siente que las palabras de su entorno la hieren, la juzgan o limitan, y por ello se produce un deseo de no oír o de filtrarlas. Puede manifestarse ante presiones, críticas constantes o experiencias en las que se siente obligada a aceptar una versión que no le corresponde. A nivel emocional, está conectado con la necesidad de protegerse ante juicios o confrontaciones, y con la dificultad para integrarse en un grupo cuando la información que llega es dolorosa.
Mensaje Simbólico
El mensaje simbólico del cuerpo a través del oído medio es: «escuchar requiere discernimiento». Indica que la persona necesita decidir qué información permite que entre en su mundo interior y qué puede dejar pasar. El oído medio entonces se convierte en una frontera suave que protege la capacidad de escuchar lo que nutre y lo que socava su equilibrio.
Causa Psicoemocional
Las causas psicoemocionales suelen organizarse en dos planos: personal y transgeneracional.
- Conflicto personal: sentir presión para escuchar y aceptar comentarios que lastiman; miedo a la crítica que emite alguien cercano; necesidad de protegerse de palabras que hieren.
- Conflicto de límites: dificultad para establecer límites en relaciones cercanas; sensación de invasión por palabras ajenas.
- Patrón transgeneracional: familias que han aprendido a silenciarse ante la autoridad o a no expresar las propias necesidades, heredando la tendencia a filtrar o bloquear lo que llega a los oídos.
Camino de Sanación
- Identifica la situación en la que sientes que debes dejar de escuchar o que las palabras de otros te hieren. Escribe qué emociones surgieron y cuál fue el contexto.
- Practica la escucha consciente durante una conversación: escucha sin interrumpir, toma una respiración profunda y resume en una frase lo que recibiste antes de responder.
- Realiza un acto simbólico de protección: coloca una vela o una pequeña pluma cerca de tu oído y di en voz baja una afirmación: «Estoy eligiendo qué escuchar y protejo mi equilibrio».
- Afirma diariamente: «Mi oído escucha con claridad y discernimiento; lo que no me nutre, lo dejo pasar».
- Conecta con tu voz interna: escribe una carta a la persona involucrada expresando lo que necesitas escuchar para sentirte seguro y respetado; guarda la carta como recordatorio de tus límites o comunícala si corresponde de forma asertiva.