Trompa de Eustaquio
Conflicto Biológico
El conflicto biológico asociado a la trompa de Eustaquio se vincula a un desequilibrio entre escuchar y hablar. La presión o bloqueo en el oído medio puede interpretarse como una defensa ante informaciones dolorosas, ruidos excesivos o críticas que la persona prefiere no oír. Este síntoma invita a revisar si hay situaciones en las que se ha optado por no escuchar para proteger la seguridad emocional, o si se evita responder ante lo recibido para mantener la paz interna.
Mensaje Simbólico
El mensaje simbólico es que el cuerpo intenta restablecer el equilibrio entre recibir y expresar. La trompa de Eustaquio funciona como un puente entre oír y hablar; cuando hay conflicto, la presión simboliza la necesidad de dar voz a lo que se calla y al mismo tiempo escuchar con claridad, buscando un canal más armonioso entre lo interior y lo exterior.
Causa Psicoemocional
Posibles causas psicoemocionales:
- Conflictos de reconocimiento: sentir que la propia voz no tiene peso o que es necesario callarse para evitar conflictos.
- Temor a la verdad dolorosa o a quedar expuesto ante otros, generando bloqueo para oír y responder con claridad.
- Patrones transgeneracionales de silencio emocional, donde expresar emociones se consideraba peligroso para la armonía familiar.
- Percepción de estímulos externos como invasivos, que activa una necesidad de protegerse mediante la reducción de la escucha o la expresión.
Camino de Sanación
Vías de sanación y toma de conciencia:
- Escucha consciente: dedicar 5 minutos diarios a escuchar sin interrumpir, primero contigo mismo y luego con una persona de confianza.
- Expresión segura: escribir una frase breve que puedas decir en voz alta y practicar su lectura para entrenar la voz y la asertividad.
- Ejercicios físicos suaves: movilizar cuello y mandíbula con suavidad, acompañados de respiración diafragmática para liberar tensiones en la garganta.
- Ritual simbólico: cerrar los ojos, visualizar la apertura del canal auditivo y imaginar la presión liberándose con cada inhalación; luego realizar un acto simbólico de liberación, como pronunciar una afirmación en voz alta.
- Reprogramación de creencias: identificar pensamientos limitantes como no me escuchan o mi voz no importa y sustituirlos por afirmaciones de valía y derecho a escuchar y ser escuchado.
